Preparación: En un bol, se coloca la harina tamizada con un colador, se añade la sal, y el agua tibia en la que habremos desecho bien la levadura, la cerveza y se va mezclando todo bien.
Cuando lo tengamos un poco mezclado, lo echamos en el banco de la cocina y empezamos a amasar la masa por lo menos 10 minutos y hasta que se quede todo homogenea y no esté pringosa, os daréis cuenta jejej...
Cuando la tengamos bien amasada la colocamos en un bol espolvoreado de harina para que no se pegue mucho y la dejaremos tapada con un trapo un poco húmedo de 1 a 1,30 h.
Pasado este tiempo le daremos un segundo amasado, y si queremos lo podremos dividir en dos, como en mi caso, yo añadí a una masa tomillo y a la otra orégano mientras daba el segundo amasado.
Dejaremos unos 50 minutos mas de reposo y después ya le daremos la forma que mas nos guste y le haremos unos cortes no muy profundos para que rompa la corteza, y lo meteremos al horno precalentado a 240º 10 minutos y después lo bajaremos a 200º uno 35 minutos mas, pero hay que ir controlándolo, eh? jejej...
Notas: - Le podéis echar con un colador harina por encima antes de meter al horno.
- Una forma de saber si está hecho es darle con los nudillos al pan por debajo unos golpes y si suena a hueco es que está bien cocido.
- Hay que colocar un recipiente con agua dentro del horno para que haya humedad.
- Y si tenéis un pulverizador podéis pulverizar un poco con agua nada mas meter la masa.
Canal Cuina.
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